Cuando pueda contar los surcos que ha dejado las lágrimas

AMAR HASTA EL ÚLTIMO LATIDO

  

Cuando los latidos de mi corazón

pierdan fuerza y me mire al espejo, y me cuente las líneas del código de barras como una delicada orografía de distendidos labios que han perdido su categoría geodésica;

 

cuando pueda contar los surcos

que han dejado las lágrimas y las preocupaciones curven mis comisuras y ya mi cuerpo responda despacio a mis deseos y suelte blanca mi cabellera

 

para dormirme temprano

y sobre mis rodillas enmohecidas por el peso de muchos inviernos, caiga mi libro preferido porque se me han cerrado los ojos,

 

mi corazón seguirá rebelándose,

donará sus pulsaciones, regocijándose como al oír hablar en francés, gallego o catalán,

 

por 50 euros ayudará a curar un cáncer

y como otras veces intentará disipar tus dudas; y, los anhelados horizontes también saludarán mis artificiales mañanas con el recuerdo de tus besos.

 

                                                                                      Johann R. Bach