25 ene 2015

que tus ángeles te lleven a otro lugar donde puedas encontrar otra música

BLUES PARA UN DIA DE VIENTO

Apareciste en mi vida
en un día de fuerte viento dándome a entender que me necesitabas. Eso no dio, finalmente resultado: tenías celos de todo aquello que me rodeaba:

los amigos, el club, la noche, el blues…

Luego, cambiaste de actitud.
Después de un ataque de ira en el que creí que me ibas a matar con tus propias manos me dijiste que

ya no había nada en mí
que te sirviera: una mirada, un beso, una palabra… sin dejar translucir tristeza alguna sino desprecio cruel:

sin hacer aprecio en un primer momento
–como en un preludio de una canción triste-; contando a otras personas cómo al situarte a mi lado era perder el tiempo en un movimiento de la fase final.

Por mi parte, dolido,
sólo puedo pensar que, parafraseando a Bob Dylan, no soy yo el que buscas y me esfuerzo por comprenderte.

Por ello, así te canto
en este día de fuerte viento:

Si me dices adiós
sin confesar que quieres un futuro limpio; claro para tus padres que no han querido bendecir nuestro amor,

si te vas sin decirme
que en realidad soñabas con un mundo en el que ningún ruiseñor faltase cantando en tu ventana al llegar la primavera,

(Estribillo)

que tus ángeles te lleven
a otro lugar donde puedas encontrar otra música y todo aquello que yo no pude darte. (bis)

Te prometí –como cualquier otro hombre-
lo que no tenía, sabiendo que no podía volver atrás para borrar las huellas de mi humilde origen.

Intenté convencerte
de que pararas tu reloj, que era posible que esperaras hasta que yo pudiera construir un espacio para nosotros. Siendo vano ese deseo

(Estribillo)

que tus ángeles te lleven
a otro lugar donde puedas encontrar otra música y todo aquello que yo no pude darte. (bis)

Visité a una gitana
en un día como este de fuerte viento para me echase las cartas y en lugar de enumerar mis carencias, arremetió contra las mujeres diciéndome lo que nunca había oído:

"No sabes la suerte que has tenido
al ser ella la que te abandone, pues no dudes que todas las mujeres son furiosas, propensas a la ira,

incapaces de dominarla
y, llevadas por la iracundia, se lanzan al hierro, a la aniquilación de cualquier proyecto tanto si es suyo como si es ajeno".

"siempre es la ira –me repitió por tres veces-
la que hace que el sexo femenino sea el sexo nocivo y con una rabia que quema el hígado,

son arrastradas furiosas,
como morrenas arrancadas de las cumbres por los glaciares cuando la montaña se hunde y

se desliza el flanco
por el lado pendiente".

Cabizbajo salí de aquella inmunda barraca.
El fuerte viento aún no había amainado. No quise creer en un mundo de fácil crueldad. Ahora miro al cielo y asumo mi parte de incapacidad para el amor.

Mi obligación como muestra
de agradecimiento es desearte

(estribillo)

que tus ángeles te lleven
a otro lugar donde puedas encontrar otra música y todo aquello que yo no pude darte. (bis) 
                                                                  Johann R. Bach

4 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Triste, muy triste, y a la vez dulce y bello >_<

    ResponderEliminar
  3. Sí, sí, muy tierno y muy dulce....

    ResponderEliminar
  4. Hermoso ,generoso al final,pero tela con la gitana jajajaj

    ResponderEliminar