30 nov 2016

¡Húndete en lo desconocido que excava! ¡Obliga al vacío a retorcerse como un gusano!


LA ESPERA DE HILARIO

No sé qué será de ti Hilario
cuando al despertar a medianoche no sepas qué hacer de esos minutos eternos que retrasan el amanecer. Por eso te escribo amor.

Tampoco sé cómo sufrirás
al no saber qué hacer de tantas y tan largas noches, de horas y horas geométricamente iguales; sin fecha fija como el brote de la almendra que ha de romper la reacia dureza de su cáscara. Por eso te envió palabras de consuelo

Veo cómo declina, en ti amor,
la esperanza, vena de una mañana que vuelve una y otra vez inútilmente como el gesto de los seres que te rodean almas atrapadas en las mallas de una espera que las corroe como un ácido.

Tampoco puedo saber
cuánto tiempo tardará ese corazón tuyo que bate con fuerza en romper tu pecho como el mar rompe su orilla, eso que no se ve.

Y es que aquí Hilario de mi vida
todo ocurre como si la existencia no fuera más que un dormir desengañado a la espera que germine… algo nuevo.

Sabes que viví junto a ti
el minuto de la felicidad y del placer absolutos. Yo era una colmena que echaba a volar hacia las fuentes de la altura con toda su miel y todas sus abejas. Te lo digo para que lo recuerdes… lo mismo que yo…

Aún te espero amor
para que vuelvas a experimentar otro de esos minutos maravillosos aunque tu duda se halle en el origen de toda grandeza. Semejante duda no es más que genio. No hay que confundirla con lo incierto provocado por el "desmigajamiento" de los poderes de la sensación.

Una mano gigantesca
nos transporta sobre su palma hacia el Mundo del Ápex. Cada una de sus líneas califica nuestra conducta. Y ahí permanecemos como planta que arraiga en su suelo, aunque mi estación no sea de ninguna parte.

El mundo se te hace pequeño
y cada vez se hace más difícil albergar en él un corazón como el tuyo… en constante crecimiento… con sus latidos desbordantes de un amor que llega hasta esta Escalera de Mármol.

No desesperes Hilario
nuestro amor no morirá. Tu audacia fue una verruga, tu acción, una imagen especiosa, coloreada por trato de favor.

¡Húndete en lo desconocido que excava!
¡Obliga al vacío a retorcerse como un gusano!

Entretanto yo seguiré a tu lado
como una estrella que se ha de encender en tu frente cuando tú lo decidas.

                                                                                                  Johann R. Bach


4 comentarios:

  1. Griselda Corni Fino
    10:14 (fa 5 hores)

    Es estupendo como siempre tu escrito , y tienes razon viajamos en una mano monstruosa hacia ninguna parte destruyendonos el acido corrosivo de una espera vana ,y si nos acercamos al borde echandole valor :solo se atisba el vacio

    ResponderEliminar
  2. una descripción exacta, a través de metáforas, del otro de la existencia, del amor que se marchita, de la esperanza, que desespera. Hay otro mundo, adonde nos dirigiremos, sin plazos caducos, para revivir las experiencias vividas. Bueno, como todo lo que escribes, con un recuerdo para Becquer, Cartas desde mi celda.Julio G.

    ResponderEliminar
  3. PILAR NOVALES

    COMO SIEMPRE JOAN Rr,
    TUS PENSAMIENTOS
    SON ORLAS DE LA PALABRA
    SIENDO FELICES MOMENTOS.

    ResponderEliminar
  4. aunque tu duda se halle en el origen de toda grandeza. Semejante duda no es más que genio. No hay que confundirla con lo incierto provocado por el "desmigajamiento" de los poderes de la sensación.La espera de Hilario es el despertar y el creer en si mismo.Salir del abatimiento,la tristeza ,la soledad,la duda existencial de lo humano y divino tras un trecho largo de vida.Una carta de las que ya no se escriben y entra por el buzón del alma hilvanada de estupendas metáforas:"¡Húndete en lo desconocido que excava!
    ¡Obliga al vacío a retorcerse como un gusano!"____Chapó,poeta del alama!!!!***

    ResponderEliminar