13 mar 2017

hombres blandos y sedientos como hierba, insaciables como hierba; sus nervios, raíz que cunde.


Una y otra vez la misma cosa

Las temperaturas han bajado,
recorriendo los campos, aunque, irreversiblemente, los almendros y los ciruelos han coloreado el paisaje.

Eso que hemos convenido en llamar primavera
se viste de claros colores: una y otra vez la misma cosa. Inútil tratar de cambiar esa precesión de los equinoccios.

Emergimos de la arena de las playas
de los mares de Proteo, almas que han marchitado los pecados públicos cada una en su oficio como un pájaro en su jaula;

malos hábitos, astucia y engaño,
o simplemente la urgencia egoísta de sacar provecho de la sangre ajena.

El hombre se altera fácilmente con la violencia.

Muchos son blandos, un manojo de hierbas, labios y dedos que ansían un pecho blanco, ojos de té que se entrecierran al resplandor del día, y pies que correrían, sin que importe cuán cansados, a la menor señal de ganancia.

La primavera es para ellos
una oportunidad de especular con el grano. Son hombres blandos y sedientos como hierba, insaciables como hierba; sus nervios, raíz que cunde.

Algunos, intransigentes, exorcizan a gritos al diablo,
otros más pacientes, esperan a que un abril lluvioso descargue como una floración del cielo le gangrene a cada quién su herida.

Una y otra vez la misma cosa:
primavera en el hemisferio norte de este planeta.

                                                                                  Johann R. Bach

“Literatura es lo que leí en mi larga, larguísima, adolescencia.


SEMANA 3. 12 DE MARZO


Pierre insiste a menudo en que el poeta sueña con escribir una novela mientras que el verso es la aspiración inconfesable del novelista.

Es divertido ver que Damián dice que esa frase es como oír cómo llueve… como una música de fondo y para reafirmar su apuesta por la poesía cree que solamente en el arte poético se puede producir la paradoja de que la parte sea superior al todo: El fragmento incluye más contenido que el sistema.

Todo ello me recuerda un comentario de Leo P. Hermes que más o menos decía así: "Literatura es lo que leí en mi larga, larguísima, adolescencia. El resto –una miríada de poemas y novelas- es erudición".

                                                                                            Johann R. Bach

10 mar 2017

Sí, sí. Se habla mucho de que los robots deberían pagar las cuotas de la Seguridad social


SEMANA 3. 11 DE MARZO

Después de no poder definir al hombre puesto que su conciencia lo transforma, hay que definir qué es un robot.

Sí, sí. Se habla mucho de que los robots deberían pagar las cuotas de la Seguridad social de los humanos en compensación por haberlos sustituido.

El hombre es insustituible y mucho menos si es un enfermo no reconocido como tal. Y es que los humanos no perdonan un error aún después de toda una vida de aciertos.

Nuestra esperanza no está en la perfección de los robots, sino en la injusticia de Dios.

                                                              Johann R. Bach

el ruido es un invento moderno.


SEMANA 3. 10 DE MARZO

Hoy se nos pide que opinemos sobre las frases siguientes:

Un ambiente mediocre
es aquel donde no hay personas inteligentes.

Una persona inteligente
no puede vivir –se ahoga- en un ambiente mediocre.

La verdad es que el ruido es un invento moderno.

y las ciudades ilustres no mueren patas arriba como las cucarachas: acaban siendo un lugar de veraneo; un lugar donde nada desconcierta más al rico que toparse con alguien que no lo envidie por morar en una ciudad de moda.

                                                                   Johann R. Bach

9 mar 2017

La sórdida penumbra orgánica


SEMANA 3. 9 DE MARZO


La sórdida penumbra orgánica
donde nace la idea no importa, sino su dura punta de diamante.

El carbón sometido a grandes presiones
y grandes temperaturas en la oscura y profunda entraña de la tierra cuando aflora de forma rápida y brusca a la atmósfera, se transforma por el efecto del temple en un "cubito helado" que llamamos diamante.

En caso contrario,
si el carbón sube a la superficie terrestre de forma lenta se origina el grafito "un carbón blando" negro aunque conductor del calor y la electricidad gracias a sus impurezas férricas.

                                                                                     Johann R. Bach

Escribir, escribir... Sentir, sentir


SEMANA 2. 7 DE MARZO

Escribir, escribir…,
escribir paciente y laboriosamente manjares suculentos a Cassia, a Xana, a Asun, a la Profe de Mates, a Patricia, a Griselda, a Rosi, a Carme Creus, a Misteri 777 la Dama d'Elx, a Rosalva, a Pilar reencarnación de Novalis…

Sentir, sentir…,
sentir como el espíritu madura más allá de los años, dejando atrás esa tediosa obligación de ser encargado del mundo. Sentir la lluvia como una floración del cielo…

                                                                                Johann R. Bach

No esperemos que la civilización renazca,


El sello de LOS SIGLOS

Si tuviera que juzgar los siglos no dudaría en afirmar que lo que se extingue, a lo largo del siglo XIX, es la dignidad de los humildes. No obstante mi siglo predilecto es, precisamente, el XIX. Porque me enseñó a ver los demás siglos.

Me encantó leer, con ojos silenciosos de búho, lo que se escribía a lo largo de tantos y tantos siglos donde florecieron culturas múltiples y civilizaciones, pero civilización es lo que muere con el XVIII. La Era Atómica nacida en pleno siglo XX, como colofón de dos grandes guerras frustró los proyectos de una nueva civilización.

Demasiadas veces hemos contemplado la historia con ojos de esfinge para no ver que la culpabilidad del mundo moderno es mayor por haber arrasado las chozas que por haber incendiado los castillos. Hemos simpatizado –por comodidad- con cualquier hombre que no muestre sus opiniones y hemos menospreciado esa "Fuerza Metafísica" que empuja, a pesar de todo, a seguir adelante.

Alabar a la juventud –poner en ella, consecuentemente, alguna esperanza- es olvidar nuestra pasada mediocridad y bobería. Convencido estoy que la sabiduría de este siglo XXI se reduce a observar el mundo con la mirada amarga y sucia de un adolescente depravado, pues es privilegio de esta centuria el invento del frío oro azul, del pedantismo y la obscenidad.

No esperemos que la civilización renazca, mientras el hombre no vuelva a sentirse humillado de consagrarse a tareas económicas, a guardar, como las hormigas, alimentos para el invierno, a construir muros de piedra seca y bancales, a proteger los huertos con vallas de olivos, naranjos y granados, y, a adornar con almendros los márgenes de los caminos.

A medida que suben las aguas de este siglo, los sentimientos delicados y nobles, los gustos voluptuosos y finos, las ideas discretas y profundas, se refugian en unas pocas almas señeras, como los supervivientes del Diluvio sobre algunos picos silenciosos.                                                              

Lo que más me fastidia de este siglo de telefonía móvil -y no se lo perdono- es que me agobie con tal náusea al leer los periódicos o ver la televisión que olvido que su abyección no mancha la intacta primavera.

                                                                                                Johann R. Bach

6 mar 2017

yo tomaba una postura un poco escéptica.


UNA CRÍTICA DIVERTIDA

Ante la crítica feroz de un poeta a la literatura contemporánea en el sentido de que algunos llaman "escribir con franqueza" vomitar su hiel y su baba, mientras otros denominan "establecer relaciones auténticas" entre las diferentes formas de escribir su afán de hundirse en la sangre y la mierda, yo tomaba una postura un poco escéptica.

De repente encontré entre las líneas de aquella crítica lo más divertido que he leído sobre ciertos conceptos la literatura: "La literatura contemporánea parece una algarabía de eunucos en celo".

Cada vez que recuerdo esa frase
estalla en mi pecho la carcajada.

                                                                                        Johann R. Bach

3 mar 2017

los estimulantes son fuente de malhumor.


SEMANA 2. 3 DE MARZO.

La rutina encallece la inteligencia como las manos del labrador. Cada vez se hacen más útiles los estimulantes "rutinarios"… el café en el desayuno, el ácido ascórbico (vitamina C), el azúcar (carbohidratos), la teodramina del chocolate, los ahumados del pescado…

Sin embargo, los estimulantes son fuente de malhumor.

¿Qué enfado tendrá el funcionario
que echa espuma por la boca? ¿Por qué no habla nuestro idioma?

¿Qué persigue con su rabia blanca y verde
deshilachando el horizonte, sin preguntarse siquiera por qué se odia o qué no desea perdonarse?

¿Se arrepiente de haberse enjaulado
en un ambiente hostil a todo lo que no forma parte del mundo de "La Administración"?
                                                               Johann R. Bach

1 mar 2017

Se manejan con hilos


SEMANA 2. 2 DE MARZO.

Algún día tendremos que reconocer
que es difícil no acusar de egoísta a quien no se sacrifica a nuestro egoísmo.

Ardua es la ciencia de psicología,
y, para lograr comprenderla caminamos solos sobre este teatro del mundo. Se tallan en madera los rostros de las marionetas: los rostros malhumorados se extraen de la madera de un estrycnos, los rostros alegres del castaño. Se manejan con hilos. Con su arrugada piel, sus cabellos plateados y sus hundidas sienes parecen verdaderos ancianos; mas acabada la comedia, se derrumban inmóviles.

Igual que marionetas,
los humanos pasan, como en un sueño, por la vida.

                                                                                                    Johann R. Bach

28 feb 2017

La vida en este planeta se podría encajar en meses y semanas en relación al día.


SEMANA 1. 1 DE MARZO.

La vida en este planeta
podría resumirse en ajustar la actividad de las especies a módulos múltiplos  o submúltiplos de 12 y al mismo tiempo encajarlos con periodos múltiplos de 7. Sencillamente encajar meses y semanas en relación al día.

Mirando fijamente cualquier imagen
de un horizonte vacío de barcos, puedes entrar en un sueño en el que las cosas, los seres y la luz ante tus ojos tomando un maravilloso paisaje bajo una suave música que te sitúa entre el cielo y el mar.

                                                                           Johann R. Bach

27 feb 2017

Sólo en la noche de la obsidiana se puede ver cómo se coagula la plata


SEMANA 1. 28 DE FEBRERO.


Detrás de un acto sencillo
–como la propuesta de que febrero tenga 28 días y cada cuatro años 29- se esconde la expresión resignada de una multiplicidad de motivos complejos.

Sólo en la noche de la obsidiana
se puede ver cómo se coagula la plata, cómo adquiere dureza con el estaño.

¡Cadaqués!

Tú, Asun eres su mar, su ahogada que clama sobre la arena del tiempo en tierras extrañas.

                                                            Johann R. Bach



26 feb 2017

Sólo el relámpago y su luz turbia de platino hace de la noche actual –de la cual procedo- un auténtico placer.


SEMANA 1. 27 DE FEBRERO.

Toda civilización antigua,
rica, madura y su doctrina severa, práctica y amable se reconoce por sus huellas fósiles.

Sólo el relámpago
y su luz turbia de platino hace de la noche actual –de la cual procedo- un auténtico placer.

Hay que recoger las uvas del mar
y escribir mientras sea posible… en silencio.

                                                                         Johann R. Bach

25 feb 2017

Sigues siendo la misma –piensa el solitario-:


SEMANA 1. 26 DE FEBRERO.

Un simple verso
impacto que remueve un universo nos puede conducir fácilmente a manipular alumino-silicatos potásicos para la fabricación de la "píldora de la felicidad".

Son las doce en el aire del Meridiano de Greenwich
y en el corazón. Es la medianoche ardiente de la sangre.

No se le va de la cabeza aquella imagen.
Sigues siendo la misma –piensa el solitario-: el aire chic, el paso coqueto, el rostro orgulloso, pálido, pero iluminado por el carmín de sus labios,

impelido por el deseo
de un viejo sueño privado, amoroso y especial.

                                                              Johann R. Bach

Leonardo da Vinci se conformaba con construir artefactos mecánicos y volar entre sus dibujos.


SEMANA 1. 25 DE FEBRERO.


Tan repetidas veces
se ha enterrado a la alquimia que no queda más remedio que juzgarla inmortal. Después de Paracelso los científicos no han parado hasta poder fabricar el oro azul. Su fría cualidad es muy útil como superconductor.

Leonardo da Vinci se conformaba
con construir artefactos mecánicos y volar entre sus dibujos.

Ellos nos enseñaron que
un corazón solitario no es un corazón.

Es la válvula amarga de la sangre
que se muere por no hablar

                                                            Johann R. Bach

24 feb 2017

No es extraño que en sueños vean a un juez que mira sardónicamente al acusado


SEMANA 1. 24 DE FEBRERO.

El calderero y el albañil
(también el químico, el periodista, el poeta…) al igual que el médico, soportan muy mal resignarse a sus cualidades aunque, bien mirada, su tozudez compensa con creces cualquier deficiencia.

No es extraño que en sueños vean
a un juez que mira sardónicamente al acusado y a un cirujano extirparle un diente a un caballo con ayuda de unas vulgares tenazas y que

como niños, sin despertarse, se compadezcan del caballo.

                                                                                                             Johann R. Bach

22 feb 2017

éste es un buen día para iniciar proyectos


ERMESSENDA Y LAS SEMANAS

Semana 1. 23 de febrero.


La sabiduría se reduce para el viejo poeta chino
–acostumbrado a una vida austera, aunque bien regada de vino tinto- a no enseñarle a la hormiga cómo se debe llenar la despensa en verano para sobrevivir en invierno.

Según su horóscopo
éste es un buen día para iniciar proyectos y para cumplir años al igual que el siguiente día 24.

                                                                    Johann R. Bach

21 feb 2017

Ya está en la calle otra edición de "Las Noches en el Ápex"


LAS NOCHES EN EL ÁPEX
INVIERNO


               CUANDO SOPLE EL GREGAL Y LA CENIZA VAYA CUBRIENDO NUESTRAS SIENES HAREMOS LA COLADA DE LOS AÑOS Y LOS DESENGAÑOS.                                                  

  Johann R. Bach

15 feb 2017

La fruta tiembla aún en la cima de su curva.


LA NOCHE DE ARSENIO

Cada uno, Cassia,
vive de forma diferente la noche. Tú tienes la suerte de que el amor te colma todas las horas del día y apenas tu alma distingue el atardecer con el derrumbamiento del sol del amanecer gris y lluvioso.

La noche más terrible es la de Arsenio
puesto que en cada instante que repentinamente patentiza el progreso de los años –reflejado su rostro en el espejo- exhala un ocre olor mortecino.

Sí, sí. Arsénico tiene un sudor de olor característico
y una vivencia donde el acto espasmódico y retráctil, por medio del cual sus sienes plateadas se reconocen a sí mismas, hinca su fina extremidad en su corazón amotinado.

Ese olor acompaña cada noche
al rostro hipocrático de Arsenio que siente atados al patíbulo del tiempo sus profanados años.

Llegada la medianoche
un leve sacudimiento basta para raptar a sus manos su presa rebelde y codiciada. La vítrea frialdad de otras pupilas no refleja más que su irremediable decadencia. La ternura espontánea de su compañera se empobrece en lealtad agradecida.

Así sucede, Cassia, amor:
cae la medianoche, las densas y oscuras sombras se apoderan de su cara estrecha de caballo y su madurez lúcida se rinde al desdén.

Una tibia indiferencia
corre sobre la faz del mundo…, de su mundo. Todo parece inmóvil en la quietud de la noche… incluso la luz de las estrellas se opaca.

Nada ha cambiado,
sólo su esplendor se amortigua. La púrpura se funde en la penumbra. La angustia invade su pecho y aparentemente las cosas preparan ya su fuga, pero aún suspenden su vuelo vacilante.

La fruta tiembla aún en la cima de su curva.
Su mano derecha –Arsenio es diestro- baja y recorre el inquieto pubis mientras su izquierda palpa la piel marmórea de su compañera.

Su soledad es la más temible
y es por ello que Arsenio no puede soportarla sin volverse loco. Antaño, cuando le molestaba el calor y su habilidad era zurda su carácter era optimista, pero al adelgazar y perder la grasa subcutánea el fría penetra en su cuerpo y ya nada puede corregir el escepticismo del arte gótico de sus huesos.

                                                                              Johann R. Bach

12 feb 2017

Desde el centro de un pentágono se ven bocas comiendo y besando, escupiendo y chupando… incluso hablando.


EL ORIGEN DE LA ESTASIS

Ya no sabemos qué es lo que produce la estasis de las cosas.
¿Producen las universidades modernas medios para salvar la diferencia? ¿Para distinguir la cualidad entre los océanos de cosas?

Muchos son los que se quejan y, sin embargo poco hacen.

Sabido es que los que preparan las redes no son los que más pescan; y que, del libro viven todos menos el escritor.

El interés de los geólogos está en la arcilla.
Los metafísicos buscan entre los rescoldos de la obra acabada las huellas del Autor. 

La insolencia engendra ruina esa clase sutil de suicidio.

Sólo los conventos de las Hermanitas Asuncionistas
rechazaban el misterio fingido como medio de publicidad.

Desde el centro de  un pentágono
se ven bocas comiendo y besando, escupiendo y chupando… incluso hablando.

Parafraseando a Bart Simson,
me gustan esas tiendas llenas de cosas inútiles, de santos de plástico, poliedros de cristal de colores y flores de papel, desconcertantemente complejas.

Cosas, cosas, cosas… por todos lados cosas:
estatuas, sombrillas, mesas, sillas interrumpiendo el paso de los viandantes… restos de harina, tapas de botella de bebidas.

Cosas, cosas, cosas…
complemento exacto de calles vulgares, una matemática calma, controlada, mientras la arquitectura se reparte, se hunde entre los contenedores específicos para cada clase de basura y se levanta ante los mismos ojos nocturnos de búho.

Las ideas, "a contrario senso",
escalan, como un caracol, sobre las rocas húmedas, escondiéndose del sol y de la vista –al borde del ruidoso torrente de automóviles- y se cubren de misterio. Y también es un misterio que la estasis venosa de las piernas sea amor en estado puro.

                                                                              Johann R. Bach

¡Espera por mí!


¿ES POSIBLE TANTO AMOR?


Dentro de mí hay un mundo.

Fuera, fuera de mí misma,
hay un universo que deambula sujeto a mis incursiones –un universo (para mí) en calma, al que yo me acerco concretamente: tú mi amor… Pierre…-.

¡Espera por mí!

Sobrepasando los riesgos:
¡A cántaros! ¡Para la flor de un día!

¿Es posible tanto amor?

                                                            Johann R. Bach

Y, sin embargo, el mundo sigue girando sobre su eje y circula por una inmensa elipse imperturbable


EL SOL IGNORANTE

¿Quién adormece la inteligencia?

Algunos filósofos pesimistas creen conocer la causa de ese proceso anestesiante: la decadencia de la clase media haciendo un foso imposible entre la alta y la baja (clases inventoras de la Máquina del Estado de la cual viven) donde la vida una vez florecía… el conocimiento de las avenidas de la información.

Se acabaron –dicen- los milenios donde
el viento removía laureles y tejas y el agua caía en eneros y febreros sobre el esqueleto de las viñas vírgenes adherido a los muros.

Ahora –insisten en su argumento-
perros y licopodios conspiran para reinventar un mundo a punto de desaparecer.

Entretanto un tribunal de robots
juzgará la inconsistente protesta de hombre: Allí donde trabajan muchas mujeres los sueldos son muy bajos, están por debajo de la media.

El robot de nombre Fiscal,
manipulado por otro robot el Teniente Fiscal, manipulado a su vez por el robot Fiscal General, rastreará en playas y  bosques huellas de sandalias para acusar a todo aquello que se mueve.

Y, sin embargo, el mundo sigue girando sobre su eje
y circula por una inmensa elipse imperturbable ante la precesión de los equinoccios. El sol ignorante se renueva a él mismo desde el remoto tiempo que salió de la hendidura de huecos oscuros, de forma que su descomunal gravedad no deja escapar de sus dominios más que diminutos clústers de luz y de calor.

Conchas y microorganismos
cargados de clorofila tiñen el fondo marino fabricando luz y calor y lavan los mares de las matemáticas a los detalles, cuerpos de hombres y mujeres, ligeramente inclinados hacia adelante con respecto a la postura básica de estar de pie y el peso apoyado sobre el metatarso, mientras el otro muslo está inclinado y la pierna y el brazo opuesto cuelgan, indican un movimiento que, sorprendentemente, concluirá como el racimo.

                                                                            Johann R. Bach

9 feb 2017

Haga como su marido ¡cómprese el coche que le dé la gana!

RETALES DE ALGODÓN
Siendo ya más madura…
comenzaron a salir voces que pretendían
decirme cómo y qué tenía que escribir.

Por toda respuesta… dejé que los críticos dijeran
cuanto han dicho; rechacé su pan y aceite, cobre
y cobalto además del código cosido con silencio
en sus jardines: pasteles de neón, nada.                     J. R. Bach

Ante la avalancha de preguntas sobre el poema emblemático que incita a la lectura de la novela "Retales de Algodón", el autor de la misma me ha pedido que escriba, a modo de prólogo algunas palabras sobre ese poema.

Ermessenda, en efecto, rechazó los cargos políticos que le ofrecieron y desdeñó la posibilidad de convertirse en una «intelectual comprometida» con alguna de las causas en boga —por aquel entonces pues consideraba que no sólo la piel del Planeta Tierra estaba enferma sino que sus males eran ya sistémicos—.

Si todavía hoy merece en el Mundo del Ápex nuestra atención es porque evitó enredarse en la letra pequeña de la vida política y social, para atender a lo suyo: proponer una enmienda a la totalidad del concepto metafísico. Desde el «no-lugar» y «no-tiempo» en que supo colocarse formuló una gravísima acusación contra una época que, muy a su pesar, fue suya: «Ningún siglo anterior presenció tantas matanzas en nombre de tan transparentes imposturas».

Ese lamento profundo de Ermessenda era el mismo de muchísimos otros escritores –filósofos o no- y poetas y no tenía nada de novedoso: lo original en ella fue la forma en que lo expresó:

Siendo ya más madura…

Es decir, fue preciso madurar durante años antes de llegar a conclusiones concretas y precisas sobre las que escribir.

comenzaron a salir voces que pretendían
decirme cómo y qué tenía que escribir.

Mientras una escritora se mantiene dentro de ese "cinturón de castidad" de "lo socialmente correcto" nadie se opone a lo que escribe, pero en cuanto se rebela contra lo establecido por la "vacas sagradas" del mundo editorial, caen sobre la mujer escritora todas las convenciones del planeta. Esa actitud no es exclusiva sobre lo que se debe escribir pues ocurre en todos los ámbitos en que la mujer "se atreve" a pisar. Me encantó cierto día cuando leí un anuncio publicitario de una marca automovilística:

Haga como su marido
¡cómprese el coche que le dé la gana!

Por toda respuesta… dejé que los críticos dijeran
cuanto han dicho;

Esas palabras de Ermessenda son casi una recomendación sobre la necesidad de guardar silencio sobre las críticas que pueda recibir una escritora por el mero hecho de ser mujer. Es decir, no es conveniente caer en esa discusión estéril sobre cómo y qué se ha de escribir. Allí donde hay libertad de expresión hay crecimiento personal.

rechacé su pan y aceite, cobre y cobalto…

En esta elemental metáfora se recoge el rechazo a los alimentos (nutrición, vestidos, calzado, educación…, etc.), a la tentación de ceder por dinero (por el cobre) o por la fama, prestigio como formas de reconocimiento (el cobalto como azul cielo). Hay que poner estas metáforas en relación con la madurez expresada al principio del poema pues ese rechazo no se produce súbitamente sino que las presiones a una mujer escritora se van sucediendo en forma de rubato, con su sutil "tempo ondulante".

del código cosido con silencio en sus jardines…

Esta es una de esas metáforas que deben ser interpretadas en el contexto del poema pues se refieren a las modernas tarjetas de crédito que aparentemente abren puertas de establecimientos y vallas que dan acceso a recintos autorizados (barreras en autopistas, espectáculos producidos en canales exclusivos de TV…, etc.) emitidas en …silencio en sus jardines… (discretamente por los bancos)

pasteles de neón, nada.  

Los pasteles de neón son esos pasteles baratos en los que se escribe "feliz cumpleaños" y frases por el estilo con una caligrafía muy simple de colorines llamativos. Metáfora sucinta que significa "en resumen… "nada". Lo Breve si es bueno es doblemente bueno.

                                                                              Leo P. Hermes
               

8 feb 2017

“Que practiquen deporte ellos”.


FERTILIDAD DEL AFORISTA


Al aforista, más que un pensamiento original, le reclamamos la originalidad de que piense por él mismo, de que tenga un punto de vista propio sobre los asuntos terrenales o… incluso metafísicos. El aforista no es un filósofo, sino un paseante con capacidad de juicio y en muchas ocasiones son divulgadores de grandes pensadores.

La perfección formal, agudeza, lucidez, ironía y gracia son algunas de las características que salvan al género aforístico. Si no, se cae en la tonta ingeniosidad, en las meras ocurrencias o en la estéril grandilocuencia.

A veces se agradece la mención de algún autor con el que iniciarse en la lectura de un género determinado. En este caso, por mérito propio destaca la obra de Nicolás Gómez Dávila.

"Uno, en general, no suele arrepentirse
de no haber hecho aquello que supuestamente le habría gustado hacer". 

"La rebeldía siempre resulta cara.
Por eso siempre buscamos un culpable al cual cargarle la responsabilidad de nuestros actos".

La familia es una cárcel de cristal
donde se purga "el mayor atrevimiento": el intento de fuga.

"Todo poema es una simplificación. A veces una bella síntesis".

"Que practiquen deporte ellos".

"En los textos largos siempre encontramos algo en falta".

"Es médico aquél que entiende de lo que no tiene nombre y comprende al enfermo a pesar de los diagnósticos emitidos con anterioridad".

En no pocas ocasiones hay que escribir para ser el que está
porque eso, como mirar el paisaje que tienes delante, es "todo lo que hay".

"Escribir es la mayor aventura de la mujer madura":
al escribir reconoce que siempre fue rebelde e incorregible".

"Los pensamientos sencillos
como alas de pájaro tienen muchas dificultades para mentir, no adornan las cosas por timidez".

"Sentado en los amplios escalones
de una Escalera de Mármol se disfruta del panorámico paisaje viendo cómo crecen los frutos en umbela de la hiedra".

"El bosque escucha
a los pájaros que se paran sobre sus árboles a descansar y medita sobre su longevidad".

Las casas y el paisaje aparecen como algo humano,
cotidiano y veraz, pero también existe "lo imperdonable" y las criaturas de tímpanos metálicos.


                                                                        Johann R. Bach

5 feb 2017

Aún la noche de febrero no había echado la heladora red de plata cuando me di cuenta que estaba en el estudio de Pierre oyendo todas aquellas cosas de pájaros huyendo de los cielos inhóspitos, rosas esperando renacer de sus propias cenizas, manzanas esperando en los huertos un nuevo origen…


OJOS DE ESFINGE

Hola amor,
Esta semana he tenido una experiencia dura y maravillosa al mismo tiempo: he conocido a Pierre.

Iba paseando por Els Jardinets de Gracia cuando una enorme foto de unos niños destrozados yaciendo sobre un fondo de casas lejanas ardiendo me llamó la atención. En el cartel ponía una sola palabra Hiroshima. Hacía mucho frío en la calle y casi automáticamente entré en el local. Todas las paredes estaban cubiertas de fotos en blanco y negro.

A la vista de aquellas escenas sentí sobre mi piel la brutalidad de una guerra jamás conocida antes. Y me es imposible describirte el horror humano y su escandalosa sobredosis de realidad de aquella exposición. Como si me hubiera adivinado mi necesidad de una palabra amable, se me acercó él: un hombre de unos y siete o cuarenta y ocho años de aspecto atlético. Me dijo sencillamente que era el propietario de la sala y que a él también le horrorizaban aquellas escenas. Me explicó que, por lo menos una vez en la vida nos habíamos de enfrentar a lo más oscuro de nuestra alma… y ese era el objeto de la exposición según le había explicado el artista organizador.

Viendo aquellas fotos, es una obviedad decir que todo se estructura en un ciclo (nacer, crecer hasta "la altura" posible, morir –no importa cómo-, nada) que termina reduciendo al absurdo terrible la misma idea de guerra y la parte de la condición humana más oscura que la sostiene. Ese ¡tanto para nada! Ese tanto que obliga a mirar el mundo desde la ceguera de unos "ojos de Esfinge" para ver un retrato demasiado obsceno de nosotros mismos.

Nadie me había hablado nunca en ese tono suave y casi imposible de mantener los tímpanos vibrando con la intensidad de un diapasón. De repente, sus palabras recobraron un acento social: Me invitó a comer un plato combinado en el bar de la esquina. Mientras comíamos, con algún que otro silencio, en mi mente se recogían ideas y se grababan involuntariamente: "Todos los mundos están aquí y aquí se reúnen" –me había dicho Pierre-, "todo lo humano es también absurdamente esto: guerra tras guerra".  Sin saber por qué bebí más vino de la cuenta. Necesitaba desinhibirme, dejarme "llevar" por aquella humanidad representada en un "Adonis de carne y hueso".

Aún la noche de febrero no había echado la heladora red de plata cuando me di cuenta que estaba en el estudio de Pierre oyendo todas aquellas cosas de pájaros huyendo de los cielos inhóspitos, rosas esperando renacer de sus propias cenizas, manzanas esperando en los huertos un nuevo origen… y sus labios reblandeciendo los míos… y esa cosa creciendo en mi mano… El cuerpo sabe más que la razón –me decía a mí misma. El sentir nostalgia se convertía en deseo.

No recuerdo qué pasó aquella noche. Me desperté abrazada a Pierre, el tacto de su piel velluda tan distinta de la de las mujeres me llenaba de gozo, mi cuerpo sabía que no había habido penetración y eso me tranquilizó. Empecé a besarle el pecho hasta que se despertó. Las caricias continuaron durante toda la mañana hasta bien entrada la tarde. Sólo el hambre nos hizo abandonar el revoltijo de las sábanas.

A mis padres les dije que me iba a estudiar a casa de una compañera para estudiar, así que estuve toda la semana embobada con las caricias de Pierre. Vuelvo a tener una vida "normal" pues Pierre ha salido de viaje. Tiene una exposición en una sala de Londres y otra en Glasgow. Mi cabeza se ha vuelto a colocar sobre mis hombros aunque algo en mí se ha roto y aún no sé si eso es positivo o no. 

                                                                                 Johann R. Bach